
El gusano barrenador y la defensa de la vida
Duele la desaparición de personas y la indolencia oficial hacia las madres buscadoras, como también duele la actitud pedestre de manifestantes que causaron daños al patrimonio cultural de los poblanos.
El martilleo de un grupo minúsculo de mujeres para dañar la icónica fuente de San Miguel Arcángel es un reflejo del efecto dominó de la violencia en la tribuna parlamentaria, la complicidad con los cárteles -como lo confesó Ismael El Mayo Zambada- el enriquecimiento y lujos de políticos…
Lo ocurrió el domingo 30 en el corazón de la ciudad de Puebla durante la marcha en diferentes estados para remandar la aparición con vida de hijas (os), padres, madres, hermanos, tíos amigos es un grito de las familias para frenar la violencia en el estado y el país.
Pero al dañar la fuente de San Miguel por parte de manifestantes - presuntas feministas- no cambiará nada la actitud omisa del presunto régimen de “izquierda” de la 4T que están más interesado en tener el control absoluto de los Poderes de Estado y la riqueza monetaria.
Nada cambiará las consecuencias de la política de los abrazos y no balazos del lopezobradorismo ni la ineficiencia de los mandos policiales militarizados rebasados por la inseguridad pública en Puebla, dañando los inmuebles históricos de la ciudad.
Nada cambiará la parálisis oficial para frenar a la delincuencia y la estela de muerte en el estado, con causar daños a los muros de la catedral de Puebla -como ocurrió en otras de las marchas feministas- prenderle fuego a la puerta principal de la sede del Congreso local o grafitear inmuebles del Centro Histórico.
Cuidar los inmuebles con valor histórico y arquitectónico del centro de la ciudad de Puebla, es como cuidar la seguridad de los integrantes de las familias, de cuidar la paz de una sociedad poblana que vive el hartazgo de tantos yerros en seguridad pública.
La fuente de San Miguel atacada por la ignorancia, la ceguera cultural, la impotencia o el protagonismo ramplón, no son símbolos de Noroña, “Alito” Moreno, Zambada, AMLO, Sheinbaum, la 4T, Morena, PRI, PAN… malos policías, secuestradores, violadores, políticos hipócritas de doble moral, vividores del erario, funcionarios corruptos e incompetentes…
Cada disparo de arma de fuego para cometer un homicidio doloso, un asalto a comensales en un restaurante, para despojar de dinero a un cuentahabiente, para presionar el cobro piso, para robar un auto con violencia, para extraer hidrocarburos, vender drogas… es igual de criminal como el sonido del martilleo para dañar la fuente de San Miguel o cualquier inmuebles o monumento histórico, propio del fascismo de la Alemania nazi.
No hay antecedente en Puebla de daños causados al patrimonio cultural del Centro Histórico por movimientos sociales, agrarios, estudiantiles, de vendedores ambulantes, luchas magisteriales… pese a situaciones de brutal represión de asesinatos políticos por la confrontación de grupos sociales con los gobiernos, algunos de ellos con renuncias de gobernadores en las agitadas y turbulentas décadas de los sesenta y setenta en Puebla.
Y así como los policías -en cumplimiento de su deber- detuvieron a un par de mujeres jóvenes por los daños causado en el Centro Histórico, la misma policía debería ser más exitosa en su estrategia preventiva para acabar con las desapariciones, y otros delitos.
La misma capacidad de respuesta policial para detener a agresoras del patrimonio cultural tangible, con esa misma eficiencia deberían frenar la delincuencia en la ciudad capital y el resto del estado, neutralizar y encarcelar a los delincuentes del crimen organizado generadores de violencia, encarcelar a malos policías y políticos corruptos ligados a la delincuencia…
Nada justifica se dañen monumentos y edificios del patrimonio cultural e histórico de los poblanos, como tampoco se justifica que un gobierno de “izquierda” de la presunta 4T le dé la espalda a la población con tanta indolencia ante la desaparición de personas y el clima de violencia e impunidad de la delincuencia común y organizada, que los ha rebasado.